miércoles, 30 de abril de 2014

Charla sobre El señor Ibrahim y las flores del Corán, de Eric-Emmanuel Schmitt.

El día 15 llegó y  nuestra alegría fue supina al ver que a la biblioteca accedía un gran número de alumnos, profesores y miembros del AMPA que querían compartir sus reflexiones acerca de la novela El señor Ibrahim y las flores del Corán.

El debate comenzó con una pequeña introducción acerca de la vida y obra del autor, Eric-Emmanuel Schmitt. A continuación siguieron las intervenciones de varios profesores, principalmente referidas a  los nudos de relación existentes entre las diferentes religiones que se entrelazan en la obra.  Los alumnos callaban, mezcla de timidez y, por qué no, de cierto interés. Para algunos, seguramente, una de las primeras veces que participaban en un debate literario. Sin embargo, las tornas se invirtieron. Un tema llevó a otro y la palabra la tomaron los alumnos. El tema en cuestión, muy patente en el libro, es la relación intergeneracional entre los dos protagonistas. A raíz de ello, surcamos temas como el respeto, la amistad entre padres e hijos y los conflictos que pueden acaecer. La visión en la actualidad dista mucho ("afortunadamente", diría yo) de la que muchos de los profesores hemos conocido. Se comentaron cómo eran las relaciones padres e hijos de hace veinte, treinta años, y se comentaron las actuales. Se extrajeron conclusiones de lo bueno y de lo malo tanto en un momento como en otro y de cómo el ser humano repite pautas parentales. Otros temas satélites que edulcoraron el debate fueron el sexo, el respeto, la cultura y la sensibilidad. Sorpresa -muy grata- para todos fue que, tras una hora,  seguíamos ávidamente analizando la obra. A continuación, nos trasladamos al salón de actos para poder ver la película homónima y comparar las similitudes y diferencias con respecto al libro.


Por todo ello, desde este blog no queremos pasar por alto la oportunidad de dar las gracias a todas las personas que asistieron al debate. Del mismo modo, somos conocedores de que varios compañeros leyeron también la obra, pero no pudieron asistir por razones de horarios; a ellos, también nuestro máximo agradecimiento. Nuestra andadura quijotesca continúa. Queremos recibir nuevas propuestas de lecturas con el fin de cerrar el curso con otro éxito. Si estáis interesados, no lo dudéis. Nuestro viaje continúa  y siempre hay un asiento para ti. La Literatura y tú lo merecéis.